Las medidas generales se difunden a nivel nacional; sin embargo, ante el retorno a clases presenciales en la Sierra y Amazonía, autoridades de educación se enfocan en dar a conocer que son cinco las medidas preventivas y cinco medidas de acción ante diagnósticos confirmados son parte del protocolo del Ministerio de Educación para alertar tempranamente posibles casos de viruela del mono en las aulas.
Estas son medidas de prevención (para evita el contagio) y van dirigidas para toda la familia. Se pide no enviar a los niños a los planteles en caso de identificar los síntomas de la enfermedad los cuales son fiebre, dolor intenso de cabeza, dolor muscular y de espalda, falta de energía, malestar generalizado, erupciones o lesiones en brazos, manos, tórax, abdomen, piernas y genitales.
El siguiente y más importante paso es notificar el caso sospechoso a las autoridades del plantel. Los directivos de las Unidades Educativas serán los encargados de hacer el reporte a la dirección distrital y al subcentro de salud más cercano al establecimiento. El objetivo es hacer un rastreo entre los contactos y determinar si más personas deben acudir a una revisión médica.
Se refuerza el pedido de mantener las medidas de bioseguridad en todo momento: uso de mascarilla y lavado de manos, mantener espacios ventilados y no compartir prendas de vestir. Se pide el aislamiento temporal cuando exista la sospecha de contagio o si un familiar está contagiado con el virus.
Hasta el momento se han logrado confirmar 35 casos de viruela del mono en Ecuador, entre ellos dos niños.