- Es una tarea urgente que se puso en marcha para dar solución al problema del tránsito que existía, debido al mal estado de este camino. Los gobiernos municipales de los dos cantones vecinos se encargaron, paralelamente, de la reparación de la capa de rodadura del puente, situado en el río Ambi. El bacheo que realiza el organismo provincial cubre un área de 88 metros cuadrados.
Edgar Negrete está feliz por el arreglo de la vía antigua entre Cotacachi y La Merced de Atuntaqui. Él es un usuario permanente de este tramo, pues, por sus labores de taxista necesariamente debe moverse con su vehículo llevando pasajeros que residen a lo largo del trayecto. “Los huecos han desaparecido y el puente que antes estaba destruido ahora luce en buenas condiciones”.
Lisbeth Quilca, habitante de la localidad, coincide con esta afirmación. Ella, al igual, destaca que el mejoramiento de la vía es un acierto de las autoridades de la Prefectura Ciudadana de Imbabura y de los gobiernos municipales de Cotacachi y Antonio Ante. “Durante mucho tiempo esta arteria estaba en malas condiciones, los carros tenían problemas para circular, pero ahora se nota el cambio y ya se pueda transitar sin ningún inconveniente”.
Desde el pasado 22 de mayo, los organismos se pusieron a trabajar de manera urgente para mejorar el estado de la carretera antigua. Por una parte, las municipalidades se encargaron de adoquinar el piso del viaducto, sin alterar el diseño original ni su estructura, considerando que se trata de un bien público patrimonial. La Prefectura Ciudadana, en cambio, a través de la Empresa Pública Imbavial, ejecutó el bacheo, en los sitios en donde se registraban enormes huecos.
Imbavial labora intensamente para cubrir con material pétreo los baches registrados en distintos puntos. Se estima que la tarea finalice el próximo lunes 5 de junio, con lo cual la vía estará completamente habilitada. El costo de esta acción es de 35.000 dólares, recursos asumidos por la Prefectura, con el carácter de urgente para atender una demanda justa de los pobladores, que padecían por los serios inconvenientes que significaba atravesar esta ruta.