En el local de la Unión de Organizaciones Campesinas de Cotacachi (UNORCAC), con la presencia del Comité Central de Mujeres de esta organización, la Prefectura Ciudadana de Imbabura firmó un convenio con el Consorcio para el Desarrollo Sostenible de la Ecorregión Andina (CONDESAN).
El objetivo es prevenir, reducir y revertir procesos de degradación de la tierra, para promover el desarrollo sostenible de comunidades rurales, asegurando la provisión de servicios ecosistémicos claves y la soberanía alimentaria, en el marco de los esfuerzos nacional para alcanzar la Neutralidad en la Degradación de la Tierra en el Ecuador, NDT.
En Imbabura, la iniciativa se aplicará en los bosques, páramos y tierras agropecuarias que se extienden desde el límite sur del Parque Nacional Cotacachi – Cayapas hacia la provincia de Pichincha, como parte del Proyecto “Establecimiento de Metas de Neutralidad en la Degradación de la Tierra y Restauración de Paisajes Degradados en los Andes Occidentales y las Zonas Costeras”, con el apoyo financiero del Fondo del Medio Ambiente Mundial, asociación constituida para la cooperación internacional, a fin de hacer frente a los problemas ambientales.
El Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) y el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) lideran esta labor, siendo el CONDESAN la institución ejecutora, con la participación de la prefectura, organismo que, de acuerdo a su titular, Richard Calderón, tiene clara la importancia de cuidar el ambiente y apoyar la actividad agrícola, marcando una planificación para cumplir objetivos concretos y juntando esfuerzos, con el propósito de hacer posible una provincia productiva que cuida el ambiente y sus recursos naturales.
Cuatro son los ejes en los que se concentran las labores de este proyecto: el fortalecimiento del ambiente habilitante para el establecimiento de metas y monitoreo de la NDT; demostración del enfoque de NDT para promover medios de vida resilientes y prácticas de manejo sostenible de tierras y manejo forestal sostenible en paisajes priorizados; promoción de mecanismos de incentivos innovadores que fomenten la adopción de prácticas de manejo sostenible de tierras y manejo forestal sostenible en paisajes agrícolas y forestales; y, monitoreo de los resultados.
Los beneficiarios son pequeños productores con economías campesinas de subsistencia. La inversión aproximada es de 450.000 dólares. Los recursos se utilizarán en tareas demostrativas que permitan promover e integrar el enfoque de neutralidad a la degradación de la tierra en diversas realidades socio ecológicas, representadas en los sitios de intervención, todo esto en el lapso de 4 años.
