El paso por el sector del Juncal se encuentra restringido, y la Policía Nacional ha instado a los conductores que se dirigen a Pimampiro y Tulcán a utilizar la vía a Mira.
La razón detrás de esta medida es la paralización del paso de vehículos por parte de pobladores de diversos sectores y comunidades del Valle del Chota, quienes exigen dinero a los conductores.
Estos «peajes» improvisados se han establecido a lo largo de toda la carretera, y algunos conductores afirman que las exigencias se realizan bajo amenazas.
Estas prácticas, que vuelven a surgir, son especialmente notables en la temporada navideña y de fin de año.
Hasta el momento, las autoridades de la provincia no han emitido pronunciamientos sobre este hecho, dejando a conductores y pobladores afectados por esta situación sin una solución clara en el horizonte.