Una balacera estalló en la tarde del miércoles en el centro de Otavalo, específicamente en la intersección de la Panamericana y la Avenida De Los Corazas, generando un ambiente de caos entre los transeúntes y comerciantes de la zona. El tiroteo, ocurrido a las 16:39 horas, tuvo lugar en el contexto de una persecución policial a vehículos sospechosos de estar involucrados en actividades de contrabando.
Según los informes preliminares proporcionados por las autoridades, no se han reportado heridos ni fallecidos como resultado de este violento incidente. Sin embargo, durante el operativo de persecución, se produjo un accidente de tránsito en la misma área. Afortunadamente, este accidente no dejó personas heridas, pero se informó que dos vehículos, un taxi y una camioneta doble cabina, resultaron impactados durante el intercambio de disparos.
Ante la situación, la Policía Nacional activó un despliegue significativo de fuerzas de seguridad para restablecer el orden y garantizar la seguridad de los ciudadanos en la zona. En el operativo se desplegaron cuatro patrulleros y diez motocicletas, con el objetivo de contener la situación y asegurar que no hubiera más peligros para la comunidad.
Las fuerzas del orden se encuentran actualmente trabajando en la investigación del suceso, centrando sus esfuerzos en la identificación de los vehículos implicados en el contrabando, así como en la recopilación de evidencia que permita esclarecer los hechos. Este tipo de actividades delictivas ha generado una profunda preocupación entre los residentes y comerciantes locales, quienes han manifestado su temor ante la creciente inseguridad en la región.
Las autoridades han instado a la población a mantenerse calmada y a colaborar con la investigación, subrayando la importancia de la cooperación ciudadana para llevar a cabo las diligencias pertinentes y evitar futuros incidentes de este tipo.
Asimismo, se ha señalado la necesidad de mantener una vigilancia constante en las zonas más vulnerables de la ciudad, para prevenir la ocurrencia de actos delictivos que pongan en riesgo la tranquilidad de la comunidad.
La Policía Nacional continúa monitoreando la situación en el área, garantizando que la seguridad de los ciudadanos se mantenga como una prioridad mientras avanza la investigación.