Diego García, quien ejerció como prefecto de Imbabura entre 2009 y 2014, fue sentenciado este 12 de septiembre de 2024 a un año de prisión por peculado. La Fiscalía General del Estado informó que el Tribunal, de manera unánime, acogió las pruebas presentadas por la Fiscalía, determinando a García como autor directo del delito.
El caso se originó en 2009, cuando García, mientras ejercía como prefecto, habría contratado a seis guardias de seguridad para su domicilio en Ibarra, utilizando fondos públicos. Los guardias trabajaban en turnos rotativos las 24 horas del día, incluyendo feriados. Según las investigaciones, el perjuicio económico para el Estado asciende a USD 182.636,11.
La sentencia se dictó en el Complejo Judicial del norte de Quito, en la unidad especializada en delitos de corrupción y crimen organizado. Entre las pruebas se incluyen un informe de la Contraloría, declaraciones de los guardias contratados, y pericias contables que sustentan las irregularidades.
La Fiscalía reafirmó su compromiso en la lucha contra la corrupción y la recuperación de los recursos públicos.
