Los comuneros de la comunidad del Inca, ubicada a 35 minutos del cantón Pimampiro, expresan su creciente preocupación ante la presencia de un oso andino afectando al ganado del sector durante el último año. En los últimos días, varios comuneros reportaron ataques a sus vacas, lo que genera importantes pérdidas económicas en una zona donde la crianza de ganado y la venta de leche son las principales fuentes de sustento.
El temor de los pobladores no se limita solo a las pérdidas en el ganado, sino que también temen por su seguridad personal, preocupados de que el oso pueda atacar a las personas. A pesar de haber informado al Ministerio de Ambiente sobre la situación, los comuneros afirman que hasta el momento no se ha tomado una acción efectiva para resolver el problema.
La presencia de osos andinos es más frecuente en las zonas pobladas de comunidades cercanas a Pimampiro, lo que los expertos atribuyen a la destrucción del bosque, obligando a estos animales a buscar alimentos en áreas más habitadas. Esta situación genera un dilema social y ambiental, ya que los comuneros son conscientes de que el oso andino es una especie protegida, pero su presencia está causando graves afectaciones económicas por la muerte del ganado.
La comunidad espera una pronta intervención por parte de las autoridades para encontrar una solución que proteja tanto a los animales como a los medios de vida de los habitantes de la zona.
