El próximo lunes 28 de octubre, los cinco alcaldes de Imbabura y Pichincha se reunirán en una sesión del directorio para discutir, en segundo debate, el estatuto de constitución de la Empresa de Agua Potable Pesillo-Imbabura. Sin embargo, la reciente sesión Nro. 73 del Concejo Municipal de Otavalo, celebrada el jueves 24 de octubre de 2024, generó un intenso debate entre la alcaldesa de Otavalo, Anabel Hermosa, y varios concejales.
Durante la sesión, Hermosa solicitó mayor transparencia en la información técnica y económica relacionada con la gestión anterior del proyecto, planteando dudas sobre su manejo. A pesar de que en el inicio de su gestión había declarado que «Otavalo no necesita el agua que brindaría este proyecto», el Concejo Municipal le autorizó participar en la sesión del directorio para tratar sobre la creación de la nueva empresa pública.
El concejal, Jorge de la Torre, destacó la importancia de que las comunidades rurales participen en la administración de la empresa pública, advirtiendo que «las comunidades no se quedarán cruzadas de brazos» si sus necesidades no son incluidas en el proyecto. Por otro lado, el concejal Alberto Morales criticó la politización del proyecto Pesillo-Imbabura, señalando la candidatura de Fernando de la Torre, presidente transitorio del consejo de juntas de agua, quien aspira a una curul en la Asamblea Nacional por la Revolución Ciudadana en las próximas elecciones.
Fernando de la Torre y otros dirigentes ya han liderado manifestaciones en la capital imbabureña en torno a esta problemática, lo que resalta la creciente tensión en torno a la administración del proyecto de agua.
