El 25 de septiembre de 2024, la Corte Nacional de Justicia confirmó la inocencia del policía David Velasteguí, quien había sido sentenciado a tres años de prisión por el delito de extralimitación. Este fallo se produce después de que Velasteguí apelara la decisión previa, que resultó de un incidente ocurrido en agosto de 2018.
Los hechos se remontan a un operativo policial en el Valle del Chota, donde Velasteguí intentó evitar el secuestro de una grúa y un vehículo implicado en un siniestro de tránsito. Durante la operación, se produjo una persecución que culminó en enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los moradores de la zona.
Tragicamente, en el transcurso de estos enfrentamientos, Andrés Padilla perdió la vida debido a un disparo realizado por Velasteguí, lo que llevó a su detención por parte de sus propios compañeros que buscaban que el caso fuera llevado ante la Justicia.
Desde el inicio del proceso, Velasteguí ha manifestado su preocupación por la criminalización de su labor como policía. “Mi país, donde después de casi cinco años hoy la Fiscalía solicita mi detención o cambio de medidas, como el peor delincuente del mundo. Aquí estoy y aquí estaré siempre trabajando con la cabeza en alto”, declaró Velasteguí el 1 de septiembre de 2022. Su defensa también resaltó la disparidad con los tratamientos legales que reciben otros actores del crimen, comparando su situación con la de criminales como los que colocan bombas o asaltos.
Con la reciente decisión de la Corte, se abre un nuevo capítulo en este polémico caso, que ha suscitado un amplio debate sobre la situación de los policías en el país y los desafíos que enfrentan en el cumplimiento de su deber.