Un emotivo momento se vivió en el Hospital General San Vicente de Paúl con la graduación de Derek, un valiente niño prematuro que, tras un proceso de atención especializada, logró superar los desafíos de su nacimiento.
Derek nació con 28 semanas de gestación y un peso de 940 gramos, lo que requirió una intervención inmediata del equipo multidisciplinario del servicio de Neonatología. Durante 59 días, recibió cuidados integrales, de los cuales 41 días permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN). Gracias al esfuerzo médico y al amor de su familia, fue dado de alta con un peso de 1.630 gramos.
La graduación de Derek simboliza no solo su recuperación, sino también el compromiso del personal médico que acompaña a los recién nacidos prematuros en su lucha por la vida. “Los llevo en mi corazón, porque desde el día uno, me trataron como si me conocieran, dándome palabras de aliento. Ha sido un proceso triste y a la vez muy feliz. Dios les pague por recibirme siempre con ese cálido abrazo todos los días”, expresó su madre, Elena, con profundo agradecimiento.
Con este logro, el Hospital General San Vicente de Paúl reafirma su compromiso con la atención neonatal de alta calidad, brindando esperanza y cuidados especializados a los más pequeños y sus familias.
